miércoles, 11 de noviembre de 2015

SENDERISMO: RUTA 3 - SIERRA MORENA. BAÑOS DE POPEA, ARROYO BEJARANO Y FUENTE DEL ELEFANTE




            Tercera ruta de Senderismo consecutiva la que realizamos Fran Maza y yo el sábado 7-11-2015 por la Sierra Cordobesa, concretamente por los alrededores de Santa María de Trassierra, a unos 15 kms de Córdoba, localidad famosa entre otras cosas por tener a Luís de Góngora como párroco en el siglo XVII.


            Estas rutas que estamos realizando son aptas para hacerlas en familia y pasar un gran día de campo, y un buen ejemplo es esta última, en la que pudimos visitar zonas naturales tan bonitas como el Arroyo Bejarano, la Fuente del Elefante o los Baños de Popea.




            Auque se puede empezar desde diferentes puntos, nosotros comenzamos nuestro caminar desde el mismo pueblo de Santa María de Trassierra, dirigiéndonos inicialmente hacia la Fuente del Elefante por unos parajes de arboleda diversa y zonas de pasto para animales, como podemos ver en las siguientes imágenes.














            La Fuente del Elefante es una escultura de la época califal (siglo X), con forma de pequeño elefante, que hacía de surtidor de agua y formaba parte de un palacio de recreo del Califa que se encontraba en este lugar.









Junto a la fuente también tenemos algunos restos del Acueducto romano de Valdepuentes o Aqua Augusta, que data del Siglo I y que llegó a tener más de 18 kms de longitud.




            Desde aquí nos dirigimos hacia la Casa del Coronel atravesando una zona de arboleda tan variada como vistosa, con pinos, alcornoques, encinas,…, entremezcladas en un enclave idílico. Por esta zona nos cruzamos con un gran número de cicloturistas.









            La Casa del Coronel, también conocida por mucha gente como la Zahúrda del Coronel, hoy en día en ruinas, estuvo destinada en sus días a ser fábrica de paño, aunque anteriormente fue un eremitorio, una zona de retiro y oración para anacoretas.






            Siguiendo nuestro itinerario, nuestra siguiente parada fue en el Primer Venero del Arroyo Bejarano, una antigua construcción en piedra de la que brota el agua en una cascada, y que fue el punto de partida del Acueducto de Valdepuentes. Esta fuente natural jamás ha dejado de fluir.








            Siguiendo el curso del Arroyo Bejarano nos encontramos lo que queda del Cortijo y Molino del Bejarano…














…y en sus alrededores pudimos ver un “Corro de Brujas” o “Anillo de Hadas”, una curiosa formación circular donde nacen setas y de los que cuenta una vieja leyenda que, con luna llena, las hadas acudían a zonas alejadas de los humanos a danzar en círculo. Esto atraía a los sapos de la zona, y en donde se sentaban a contemplar el espectáculo, nacía una seta. Si los sapos eran venenosos, las setas que salían también lo eran…




Nuestro trayecto nos iba a deparar el poder contemplar el Bosque en Galería, uno de los mejores de Sierra Morena, en los que predominan sauces, chopos, álamos, alisos, avellanos…, unidos a los pinos, encinas y alcornoques típicos de la zona. Aquí también se puede encontrar el escaso y raro "Arce de Montpellier".










Nos encontramos la señalización de una “Calzada Romana”, y fuimos a echar un vistazo cruzando el arroyo para ver si la encontramos, pero nuestra búsqueda fue infructuosa, aunque al menos encontramos unos pocos níscalos…









Nos desviamos un poco del sendero de la Vereda de la Pasada del Pino para ver los restos del Molino del Martinete, de época califal, que era empleado para moler mineral, batir cobre en su batán, dada la riqueza minera de la zona. Hoy en día, sus arcos ojivales y de herradura están prácticamente cubiertos por la vegetación.






Volvemos al sendero, junto al Arroyo Bejarano, caminando por zonas donde la vegetación crea un túnel natural sobre nuestras cabezas, y pequeñas cascadas crean un sonido y unas imágenes a nuestro paso dignas de ver y disfrutar, como el Rincón del Duende.















Un poco más adelante nos encontramos unas viejas minas romanas, de las cuales se extraía cobre, oro, plata y plomo desde épocas antiguas, y que desgraciadamente algunas sirven hoy en día como vertedero natural, pese a los carteles que hay en el recorrido…










Llegamos hasta el punto en el que el Arroyo Bejarano desemboca en el Río Guadiato, y subimos un poco por el cauce del río para ver las Lagunas del Guadiato.









Volvemos sobre nuestros pasos y un poco más abajo realizamos una parada de avituallamiento, en un paraje denominado "La Tabla de la Aldea", con unas vistas preciosas y “acondicionado” para los clásicos saltos al río con cuerda…







Poco nos quedaba ya para terminar la ruta, bordeando el Guadiato, y el sendero nos seguía dando grandes imágenes, subiendo junto al Arroyo del Molinillo hasta llegar al Molino del Molinillo.











Este viejo molino de harina se surtía del agua que le llegaba del Arroyo del Molinillo, y luego el agua que salía era canalizada nuevamente hacia el arroyo por el canal situado sobre un puente que todavía se encuentra en pie.




Y finalmente, tras subir un poco por el sendero, llegamos hasta el lugar más representativo de esta ruta: “Los Baños de Popea”. Se cuenta que el nombre fue dado por el poeta Ricardo Molina, quien cuando paseaba en compañía de unos amigos vio bañándose en la poza a unas jóvenes del pueblo de Trassierra, realizando la siguiente exclamación: “¡Mirad chicos, como Popea en el baño!. Esto fue corriendo de boca en boca entre la gente del lugar, hasta que se quedó con el nombre. El comentario proviene de una escena de la película de Cecil B. De Mille "El signo de la cruz" en la que se ve a Popea (interpretada por Claudette Colbert), esposa de Nerón, bañándose en leche de burra en un gran baño.




La pena es que nos encontramos que había muy poca agua…, seguro que en una época con mayores lluvias las imágenes de los Baños de Popea tienen que ser muchos más espectaculares.



Ya solo nos quedaba la vuelta al pueblo, un par de kilómetros de caminata para completar una ruta preciosa, muy recomendable para todo el mundo. 




Esta ruta, tal y como la hicimos nosotros, constó de 12,168 kms, con un desnivel positivo de 189,92 metros, una pendiente máxima del 15%, una cota mínima de 264 metros y una altura máxima de 431 metros.







Y para terminar, nuestra cervecita de rigor, aunque para el tapeo me quedo con el de mi Linares…
¡¡¡¡¡ HASTA LA PROXIMA !!!!!


            Y como comentario aparte de esta ruta, durante todo el trayecto pudimos ver una gran variedad de setas, muchas de ellas fotografiadas para que algún entendido nos pueda decir cuales son buenas y cuales malas. Que conste que no cogimos ninguna, solo unos pocos níscalos… Gracias!!!

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@00CAFETERO

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