Los
jóvenes canteranos de Unicaja Málaga se han proclamado campeones del Trofeo
Ciudad de Linares-Día de Andalucía de Baloncesto júnior al vencer en la final
al Movistar Estudiantes en un partido igualado que se decidió en los primeros
minutos del último cuarto.
Unicaja
se sacó la espina que tenía tras la derrota en la final del año pasado frente a
Baloncesto Sevilla, en un Trofeo que había ganado en las cuatro ediciones
precedentes. Aquí os dejo los enlaces en este blog de las tres últimas
ediciones:
Estas
son las plantillas de los cuatro equipos facilitadas para los asistentes, sobre
las cuales, como de costumbre, existieron algunos cambios.
Los
encuentros se han disputado entre la tarde del sábado 27 de febrero
(semifinales) y la mañana del domingo 28 de febrero, Día de Andalucía (tercer y
cuarto puesto y final), y así han sido estos partidos:
ESTUDIANTES - 66
59 – BALONCESTO
SEVILLA
La
primera semifinal enfrentó al Movistar Estudiantes con el vigente campeón del
trofeo, el Baloncesto Sevilla, en un choque que se presentaba muy igualado como
finalmente acabó siendo.
Tras
el salto inicial, Sevilla cogió la primera ventaja por medio de un triple del
croata Leo Cizmic, aunque un parcial de 8-0 de los estudiantiles les dio una
ventaja de cinco puntos, que fue rápidamente neutralizada por los sevillanos,
colocándose por delante en el marcador por 10-11.
Un
2+1 de Alex Tamayo, el mejor jugador estudiantil en el partido, devolvía la
ventaja a Estudiantes, la cual lograron mantener durante bastante tiempo. El
marcador al final del primer cuarto presentaba una ventaja estudiantil de 3
puntos, 19-16, merced al acierto en los tiros libres.
En
el segundo cuarto el equipo sevillano llegó a colocarse a un solo punto, pero su
desacierto en ataque, donde solo se salvaba Alejandro Rodríguez, unido al
acierto en el lanzamiento exterior de los madrileños hizo que la diferencia se
ampliase hasta los nueve puntos con un nuevo parcial de 8-0, con triples de
Tamayo y Adams Sola.
La
diferencia se mantuvo estable durante los últimos minutos del segundo cuarto
para llegar al descanso con una ventaja estudiantil de diez puntos, 37-27.
El
comienzo del tercer cuarto fue muy diferente, con los jugadores sevillanos
mucho más agresivos y aplicados en defensa, y con la dupla Daniel Vicente
Sotero-Leo Cizmic cogiendo las riendas del equipo, recortando la diferencia hasta
los cinco puntos.
Pero
una nueva pájara del Baloncesto Sevilla unida al acierto ofensivo de
Estudiantes, con un parcial de 9-0, colocó nuevamente una amplia diferencia en
el marcador mediado el tercer cuarto, 46-32.
Pero
los sevillanos no daban el partido por perdido, y supieron sobreponerse a esta
situación, a la cuarta falta personal de Cizmic y a una técnica a su entrenador,
endosando un parcial de 11-0 ampliado a 17-2 para finalizar el tercer cuarto
con una ventaja de un punto, 48-49. Una pena que el lanzamiento que anotó Maura
desde más allá del centro del campo fuese fuera de tiempo.
Nada
estaba decidido al comenzar el último cuarto, y los nervios atenazaban a los
jugadores de ambos equipos, que fallaban ataque tras ataque, estando sin anotar
ninguno de los dos durante casi tres minutos.
Esta
mala racha fue rota por Estudiantes, y de que manera, puesto que con un parcial
de 10-0 se colocaban nueve arriba a falta de menos de cinco minutos, momento en
el que Sevilla anotó sus primeros puntos en el cuarto.
La
ventaja estudiantil se mantenía con cierta solvencia gracias al control del
partido que impusieron Víctor Li, Alex Tamayo y un buen Alberto Maura, pese a los
destellos esporádicos en forma de triple de Cizmic y la buena labor anotadora
de Alejandro Rodríguez.
Los
últimos intentos a la desesperada de los sevillanos no llegaron a buen término
y la victoria en el partido fue, de manera merecida, para un Estudiantes que
hizo un partido muy completo. El resultado final fue de 66 a 59 para Movistar
Estudiantes, que se clasificaba para la gran final del Trofeo.
C.B. GRAN
CANARIA - 50
84 - UNICAJA
MALAGA
La
segunda semifinal iba a enfrentar a Herbalife Gran Canaria contra Unicaja de
Málaga. Desde el salto inicial se pudo ver que la lucha bajo los aros iba a ser
muy dura.
Durante
los primeros minutos se produjo diversas alternancias en el marcador, con
fuertes defensas y ataques elaborados, sin un claro dominador.
En
los últimos instantes del cuarto, un par de aciertos en el tiro por parte de
Unicaja le dio una ventaja de cuatro puntos, 14-18, con buenos momentos de
Franco Acosta, Ablaye Sow e Ivan Raut por los malagueños.
El
segundo cuarto comenzó de manera parecida, hasta que Unicaja rompió
definitivamente el partido gracias al acierto desde la línea de 6,75 de sus
jugadores, que con dos triples de Alejandro Romero, otro de Víctor Aguilar y
otro mas de Ignacio Trujillo endosaban un parcial de 14-0 que dejaba casi
sentenciado su pase a la final.
Los
canarios intentaron recortar diferencias con el trabajo bajo los aros de Pa Mor
Diene y los lanzamientos exteriores de Guillermo Lasso, pero se encontraron con
un nuevo triple de Víctor Aguilar que dejaba la diferencia al descanso en
quince puntos favorable a Unicaja, 41-26.
Si
quedaba algún atisbo de reacción canaria fue rápidamente borrado por Unicaja al
principio del tercer cuarto merced a seis puntos consecutivos de Franco Acosta
y a un par de triples de Ivan Raut y Jesús Castillo, colocando la diferencia en
un +25 para los malagueños.
Franco
Acosta, el mejor jugador del partido (acabó el encuentro con 21 puntos), seguía
anotando con facilidad, bien secundado por Raut, mientras que Ablaye Sow se
había hecho el dominador bajo los aros, impidiendo que Gran Canaria pudiese
anotar en su territorio.
La
diferencia se mantuvo durante esos minutos para llegarse al final del tercer
cuarto con 64 a
41, veintitrés puntos de ventaja para Unicaja a falta de diez minutos.
El
último cuarto fue un mero trámite, aunque los jugadores canarios dieron la cara
en todo momento, pero la diferencia se fue ampliando de manera paulatina hasta
llegarse al final del encuentro con la máxima diferencia del partido, 34 puntos
a favor de Unicaja.
El
resultado final de 50-84 refleja claramente quien fue el justo vencedor del
encuentro, basándose en la agresividad defensiva y el acierto en el tiro
exterior.
SEVILLA - 76
59 – C.B. GRAN
CANARIA
El
encuentro por el tercer y cuarto puesto comenzó con alternancia en el marcador
durante los primeros minutos, empleándose ambos equipos con todo lo que tenían
pese a ser una final de consolación.
Los
canarios, bien dirigidos por su base Javier López Santana y con el poder bajo
los aros de Pa Mor Diene y Biram Faye, conseguían aguantar las arremetidas de
los sevillanos.
Pero
el empuje de los sevillanos, comandados por su trío principal, Daniel Vicente,
Leo Cizmic y fundamentalmente su pívot Alejandro Rodríguez Aguilar, para mi el
mejor jugador sevillano del trofeo, permitió que cogiesen una ventaja de cinco
puntos al final del primer cuarto (16-11).
Los
sevillanos comenzaron el segundo cuarto manteniendo e incluso ampliando
ligeramente la diferencia, pero fue nuevamente el base canario Javier López
quien con sus penetraciones a canasta y acierto en los tiros libres conseguía
que la distancia en el marcador no fuese excesivamente grande.
En
el duelo de bases, el sevillano Daniel Vicente tampoco se quedaba atrás, y era
capaz de contrarrestar el ímpetu canario, llevando a su equipo a una pequeña
ventaja al descanso de dos puntos, 30-28.
El
tercer cuarto volvió a comenzar igualado aunque con mucha más intensidad por
ambos equipos, pero un parcial de 8-0 tras un triple de Pedro Martín colocaba
el marcador en 40-31 para Baloncesto Sevilla.
Tras
un tiempo muerto del técnico canario se produjo una reacción de su equipo
gracias a un 3+1 de Guillermo Lasso para colocarse a solo tres puntos (43-40),
que pudieron ser menos si Pa Mor Diene no hubiera fallado completamente solo un
contraataque tras su propio robo.
Un
nuevo parcial de 7-0 de Baloncesto Sevilla les permitió coger una ventaja de 10
puntos (50-40) que mantuvieron hasta el final del tercer cuarto, al que se
llegaba con 53-43 para el conjunto hispalense.
Pero
Gran Canaria no estaba dispuesto a entregar tan fácilmente el partido, y tras
una canasta inicial de Sevilla, lograron un parcial a su favor de 6-0,
fundamentados en un buen juego de ataque, una agresiva defensa y cuatro puntos
de Biram Faye (mate incluido al contraataque, aunque no se vea muy bien),
quedando la diferencia en solo seis puntos (55-49).
Y
hasta aquí llegó la resistencia canaria, porque un nuevo parcial de 11-2
terminó de romper el partido a favor de Baloncesto Sevilla, gracias al acierto
de Alejandro Rodríguez.
La
efectividad sevillana en los tiros libres durante los últimos minutos hizo
imposible una reacción canaria, y se llegó al final del encuentro con la
victoria justa de Baloncesto Sevilla, aunque más complicada de lo que refleja
el marcador final de 76-59.
MOVISTAR
ESTUDIANTES - 66
73 – UNICAJA
MALAGA
La
gran final iba a enfrentar a dos de las mejores canteras del baloncesto
español, algo que demostraron ambos equipos, ofreciendo un gran encuentro de
Baloncesto a los aficionados que nos dimos cita en las gradas del Pabellón
Julián Jiménez.
Ya
desde el salto inicial ambos equipos se emplearon con mucha agresividad
defensiva y peleando todos los balones, forzando dos luchas y penalizaciones de
5 segundos al sacar y de 8 para pasar el centro del campo en el primer cuarto.
La
primera canasta fue para Estudiantes gracias a un triple de Víctor Li, ventaja
que no perderían en todo este periodo, aunque con ventajas cortar, hasta llegar
al 12-11 para los madrileños.
A
partir de este momento, un parcial de 9-0 durante los últimos minutos del
primer cuarto, con un muy acertado Alberto Maura y cinco puntos de Nicolás
Rodríguez, dejaba la diferencia en diez puntos a favor de Estudiantes, 21-11,
al finalizar este periodo.
Un
extraordinario inicio de segundo cuarto por parte de Unicaja, con un parcial de
13-0, daba la vuelta al partido y colocaba a los malagueños por delante en el
marcador por 21-24, merced a una buena dirección del base serbio Lazar Skoric
con dos canastas, a las que hay que sumar tres triples, uno del pívot Ignacio
Rosa que estaba muy acertado en el lanzamiento exterior.
Esta
reacción malagueña fue rota con un 2+1 de Maura y por una defensa zonal 2-3 que
fue alternando el técnico estudiantil durante los siguientes minutos, lo que
provocó un colapso en el ataque de Unicaja.
El
ataque estudiantil tampoco era muy fluido por la fuerte defensa malagueña, que
se iba cargando de faltas, y eso era aprovechado principalmente por el base
estudiantil Alberto Torres para anotar desde la línea de tiros libres y
devolver el mando en el marcador a su equipo.
Al
descanso se llegó con ventaja de Estudiantes de seis puntos, 36-30, con Alberto
Maura como su jugador más destacado. Por Unicaja era Ignacio Rosa quien
mantenía a su equipo con todas las opciones en el partido.
Una
nueva pájara estudiantil al comienzo del tercer periodo, unido al acierto de
Franco Acosta e Ignacio Trujillo, devolvía nuevamente el dominio en el marcador
a Unicaja, 36-37.
En
este momento del partido, el base estudiantil Víctor Li cogió las riendas de su
equipo en ataque con seis puntos consecutivos, y la zona 2-3 se le volvió a
atragantar a Unicaja, lo que provocó que Estudiantes volviese a dominar el
marcador, 44-41 a
falta de 4 minutos para el final de este periodo.
Poco
a poco, los malagueños mejoraron su movimiento de bola en ataque con la
aparición en el campo de su base Víctor Aguilar, lo que propició tiros más
cómodos para atacar la zona, y devolver la ventaja en el marcador a su equipo,
finalizando el tercer cuarto con ventaja de Unicaja por 48-50.
Alberto
Maura mantenía a Estudiantes en el partido, pero cinco puntos consecutivos de
José Rodríguez al comienzo del último cuarto propiciaron que las diferencia a
favor de Unicaja se ampliase a cinco puntos a falta de seis minutos, 51-56.
En
este momento llegó el punto de inflexión definitivo en el partido, puesto que
con un nuevo parcial de 8-2 para Unicaja, con una canasta de Nacho Trujillo y
sendos triples anotados por Víctor Aguilar y Alejandro Romero ponían una
diferencia en el electrónico de 11 puntos (53-64) a falta de dos minutos y
medio para el final.
Estudiantes
lo intentó hasta el final, encontrando el acierto de cara al aro que le había
faltado en los minutos anteriores, pero dos jugadas seguidas de 2+1 de Ignacio
Rosa y un triple de Trujillo hicieron inútil el postrero arreón de Estudiantes,
que, pese a todo, dejó la diferencia en siete puntos, con el 66-73 final que le
daba nuevamente el Trofeo a Unicaja de manera merecida ante un grandísimo rival
como Estudiantes.
La
organización del Trofeo designó como mejor jugador al base de Unicaja Víctor
Aguilar, mientras que el máximo anotador de la final fue el también jugador de
Unicaja Ignacio Rosa.
Un
año más hemos podido disfrutar en Linares del juego de las jóvenes promesas del
baloncesto español e internacional, y seguro que algunos de estos jugadores
llegarán muy alto.
Ignacio Ortiz
@00CAFETERO