ESPÍRITU CAFETERO: octubre 2015

Este pasado fin de semana, el sábado 24 de octubre de 2015, realicé junto a mi amigo Fran Maza una ruta de Senderismo por el paraje de Despeñaperros, concretamente lo que hicimos fue subir por el Barranco de la Niebla hasta el Collado de la Aviación, y luego bajar por el Barranco de Valdeazores.

Hasta llegar al comienzo de la ruta hicimos un tramo junto a la carretera, desde la que ya se podían observar las bonitas vistas que luego contemplaríamos mejor de “Los Órganos”, el monumento natural más significativo de Despeñaperros.

La ruta por sendero la comenzamos junto al “Túnel de Jaén”, en la Fuente de la Niebla, donde iniciamos una dura y larga subida.

Este es el tramo más duro de todo el recorrido, y para un novato como yo se llega a hacer eterno. Al llegar arriba, el sendero se suaviza, e incluso tuvimos la suerte de ver un ciervo, pero estuve lento con la cámara fotográfica y no lo pude pillar, corría demasiado…

Continuamos nuestra ruta camino del Collado de la Aviación y del mirador natural de Los Órganos, donde tenemos pensado hacer una parada para comer. Pero antes, toca otro poco de subida, que para hacerla más interesante dejamos a un lado el sendero y la hacemos un poco “a la trocha”.

Cuando estamos llegando a lo alto, pudimos ver algunos ejemplares de buitres y águilas volando sobre nuestras cabezas. Un espectáculo digno de ver.

Estas son algunas de las vistas que se pueden tener desde ese mirador natural, con un aspecto distinto de Los Órganos desde la altura y el paisaje circundante.

Tras un pequeño refrigerio, continuamos hasta llegar al Collado de la Aviación, donde se encuentra un refugio donde poder cobijarse en caso de que las situaciones meteorológicas se vuelvan adversas.

Desde aquí cogemos la pista que nos llevará hasta el Barranco de Valdeazores, sumergida entre un precioso paisaje de arboleda.

Son diferentes las especies de arboledas que nos encontramos, predominando el pino, y con zonas de alcornoques muy bonitas. También encontramos madroños, quejigos y muchos más tipos de árboles que hacen que la ruta sea tremendamente vistosa.

También tuvimos nuestros momentos para la fotografía artística y curiosa, algo que le corresponde a todo un artista de la fotografía como mi amigo Fran Maza.

Probamos a meternos por el Barranco de Valdeazores, saliéndonos un poco de la pista, pero en vista de la hora que era decidimos volver a la pista y terminar nuestra ruta disfrutando del paisaje que nos ofrece Despeñaperros en otoño.

Y antes de finalizar nuestro recorrido tuvimos la suerte de volver a ver un ciervo, a lo lejos, aunque esta vez si lo pillé con mi cámara, para que quedase constancia gráfica del momento.

Poco nos quedaba ya, aparte de seguir disfrutando de las vistas, tras haber hecho una ruta que en total fue de 13,289 kms, con un desnivel positivo de 516,22 metros, pendiente máxima del 31% y que osciló entre los 653 metros de cota mínima y 1.006 metros de altura máxima. Solo puedo decir que para ser la primera de este tipo a la que me enfrentaba me siento bastante satisfecho. Agradezco a mi compañero de andanzas y guía Fran Maza el haberme conducido por una ruta tan bonita para empezar.